Profundizar en la lectura de una obra nos permite CRECER como lectores. Decía Bruno Bettelheim que la lectura nos abre un mundo de experiencias maravillosas, nos informa, nos permite trasladarnos a mundos y tiempos lejanos; a vivir aventuras por mares, bosques y desiertos o imaginarnos en un futuro remoto navegando por las palabras de la ciencia ficción. ¿Para qué leer? Pues… para saber, imaginar, crear, sentir, compartir.

El proceso de construcción de los niños como lectores depende de los contactos que tenga con la palabra escrita, de su contacto con lecturas significativas y la valoración simbólica otorgada a eso encuentros. Por ello en la Escuela Weitzman pensamos y diseñamos prácticas pedagógicas sistemáticas de lectura.

La Mora me lee :Promovemos la lectura mediada por un adulto. La posibilidad de compartir lo que puede ofrecer un texto cuando es leído por alguien con emoción,cariño y disposición.

Círculo de lectores:para que la lectura forme parte de la vida cotidiana, fomentamos la lectura por placer y como puerta de acceso a otros campos del saber.

Leemos en clase: lecturas compartidas de obras clásicas, leyendas y novelas de autores internacionales que se presentan como espacios de reflexión lingüística y metalingüística.

¿ Quién puede confundir la función en el relato  de los cuentos del  Había una vez…”,  “Y colorín colorado…”?¿Quién puede resistirse a la invitación de imaginar un mundo maravilloso cuando la morá dice: “ Erase una vez…” o “ en un país muy lejano”…