Hemos comenzado hace muy poco nuestra lectura de la Tora nuevamente, y esta semana tenemos el kavod de estudiar parashat Noaj.
Noaj, un justo en su tiempo que recibe la orden de D´os de construir un arca con dos animales de cada especie para volver a comenzar de nuevo.
Ni bien culmina la historia de nuestro personaje principal, comienza dentro de la misma sección de la Tora el relato de la torre de Babel, donde la generación siguiente a Noaj vuelve a errar en su accionar.
Entonces, ¿De qué sirvió el gran diluvio? ¿Era necesario resetear la creación para volver a transgredir? ¿Cómo podemos conectar ambas historias para lograr aprender de nuestra Tora?
Tanto luego del diluvio, como luego de la destrucción de la torre de Babel, queda claro que el ser humano debe responsabilizarse por sus actos y entender que todo lo que hacemos tiene sus consecuencias, buenas y malas. Estamos en el mundo para mejorarlo y completarlo, no para hacer lo que queramos con el.